LAS EROSIONES DE BOLNUEVO DECLARADAS MONUMENTO NATURAL
El Consejo de Gobierno de la Región de Murcia, reunido en Mazarrón, acuerda la declaración del que ya es el segundo Monumento Natural de la Comunidad Autónoma
El ejecutivo de la Región de Murcia ha aprobado, a propuesta de la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente, la declaración como monumento natural de las Erosiones de Bolnuevo.
La singularidad, belleza y rareza de los elementos naturales y formaciones geológicas de las Erosiones de Bolnuevo hacen que este espacio sea merecedor de una protección especial que conlleve la adopción de medidas de conservación que aseguren su preservación.
Su clasificación en la categoría de Monumento Natural queda justificada por el relevante interés geológico del enclave y su valor científico, cultural y paisajístico. El espacio protegido con esta figura abarca una superficie total de 2,41 hectáreas, tal y como ha informado la alcaldesa de Mazarrón, Alicia Jiménez, tras la reunión del Consejo de Gobierno celebrado en Mazarrón.
La declaración se basa en el elevado valor y singularidad que suponen las Erosiones como ejemplos más representativos de erosión diferencial o erosión alveolar ‘en nido de abeja’, consecuencia del desgaste mayor o menor del relieve, en función de la distinta dureza de los materiales del terreno.
El entorno natural de las Erosiones de Bolnuevo alberga igualmente una abundante colección de restos fósiles, donde destacan los restos de corales y de algunos bivalvos –moluscos- de especial rareza. El conjunto ambiental recoge también significativas evidencias geológicas de la historia tectónica de la zona, que se pone de manifiesto con un afloramiento de dolomías fracturadas o la presencia de planos de falla verticalizados.
Asimismo, las Erosiones están enclavadas entre la extensa playa de Bolnuevo y el paisaje de especial atractivo de la solana de la Sierra de las Moreras. Este ambiente semiárido alberga un ecosistema de extraordinaria singularidad, donde predominan masas forestales de matorrales como espartal, tomillar o romeral y que sirven de sustento a especies de gran importancia como la tortuga mora, el lagarto ocelado o las aves rapaces águila perdicera o halcón peregrino, entre otras.
Se trata del segundo Monumento Natural que se declara en la Región de Murcia, después del Monte Arabí de Yecla, en marzo de 2016.
Fuente: Carm