EL CEIP “INFANTA LEONOR” VIAJA A LA POLINESIA FRANCESA

La visita se enmarca dentro del proyecto educativo “Comenius”

El Colegio de Educación Infantil y Primaria “Infanta Leonor” de Mazarrón ha visitado Tahití, entre los días 6 y 14 de diciembre del pasado año, con motivo de la movilidad enmarcada en el proyecto Comenius "Be healthy, feel happy". El proyecto trabaja sobre la concienciación y la promoción de hábitos saludables y la importancia de la actividad física en nuestras vidas, así como el conocimiento y el respeto de las distintas culturas y formas de vida de los países de los demás centros participantes.

El proyecto cuenta con la participación de ocho centros escolares de diferentes zonas y países como son Portugal, Italia, Inglaterra, Grecia, Bélgica, Polonia, Polinesia Francesa y España. El Director del centro, Antonio Gallego, ha sido el representante del centro educativo durante esta visita junto a otros diez profesores europeos representantes de los demás colegios participantes en el proyecto.

Durante esta visita muchos fueron los lugares que se visitaron y muchas las actividades realizadas. Los participantes disfrutaron con la visita a Papeete, capital de Tahití, donde fueron recibidos por las autoridades y por el ministro de Educación de la Polinesia Francesa. Además, pudieron apreciar su cultura ancestral con la visita al Museo de Tahití y sus islas, y la influencia de las colonizaciones en su cultura. En la visita a Tahaa, la "Isla de la Vainilla", experimentaron como su vida está marcada por la influencia del Océano Pacifico, sus impresionantes arrecifes coralinos y la fauna oceánica compuesta por delfines, ballenas, tortugas marinas, tiburones e infinidad de peces tropicales.

Por último, durante la visita a la isla de Raiatea, los participantes fueron acogidos por los habitantes de esta isla con extraordinaria hospitalidad y simpatía. La visita a dos centros educativos de la localidad de Fetuna, al sur de Raiatea, demostró lo mucho que se puede conseguir con el trabajo vocacional de los profesores del lugar. Las comidas a base de productos naturales y frutas tropicales junto con los pescados y mariscos de los mares del sur fue otro de los grandes alicientes de esta extraordinaria visita.

La actividad física compartida con los profesores, padres, madres y alumnos de los centros visitados dio aún más sentido a la visita. La práctica del buceo en los arrecifes de coral, la canoa o los juegos tradicionales, mostraron la auténtica vida de los habitantes del lugar y el arraigo que éstas tienen en sus vidas así como el afán por conservar su idioma, el Tahitiano, algo más consolidado desde que ha sido incluido en su curriculum escolar.