MAZARRÓN: UN REDUCTO DE SUPERVIVENCIA PARA LA MALVASÍA CABECIBLANCA

La concejalía de Medio Ambiente hace un llamamiento a comenzar a relacionarnos con la naturaleza de una manera más responsable, renovando nuestro compromiso con el Medio Ambiente

Podemos aprovechar estos días de confinamiento para conocer más de cerca algunos valores ambientales de nuestro municipio. Esos que en condiciones normales, con nuestro ajetreo diario, nos pasan desapercibidos.

Y es que Mazarrón es uno de los últimos refugios de especies en franco retroceso y al borde de la extinción.

Dentro de ese patrimonio natural mazarronero uno de los puestos destacados lo ocupa la Malvasía Cabeciblanca (Oxyura leucocephala). En inglés: White-headed duck.

Este pato buceador, clasificado como en peligro de extinción a nivel mundial, no lo ha tenido nada fácil. En 1977 toda la población española se reducía a solo 22 individuos en la Laguna de Zóñar en Cordoba. Saltaron las alarmas y gracias a la protección dispensada, incrementó población hasta su número máximo en España, 4.486 individuos durante el año 2000. Pero lamentablemente su tendencia es a reducirse, en Europa solo habita en España, y en 2016 se estimó que entre España y Marruecos había unos 2.500 individuos, con un total mundial de entre 7.900 y 13.100 individuos, de los que solo 5.300-8.700 serían adultos (BirdLife International, 2016)..

A Mazarrón llegaron por primera vez en 2004, y en 2007 llegamos a una población máxima de 43 ejemplares. Cada año la población fluctúa, ya que se redistribuyen entre distintos humedales del levante peninsular, y probablemente este año la población local se encuentre entre unos 10 y 20 ejemplares adultos. Los movimientos para trasladarse son principalmente nocturnos, y pocas veces se ven las malvasías cabeciblancas en vuelo de día.

En Mazarrón, mediante un proyecto LIFE de la Unión Europea, coordinado por la Dirección General de Medio Natural y en colaboración con los ayuntamientos de Molina de Segura y Alhama de Murcia, se realizaron entre 2010 y septiembre de 2014 exitosos esfuerzos para adecuar hábitats y mantener y aumentar la población de esta anátida.

Algunas características breves sobre la Malvasía

Especie buceadora, que obtiene generalmente su alimento durante las inmersiones, de hasta un minuto de duración y diez metros de profundidad, y en menor medida en superficie. Su dieta se compone sobre todo de larvas y pupas de mosquitos, seguido de semillas. Otras presas menos importantes son pequeños caracoles, escarabajos, gusanos y brotes de plantas.

Una curiosidad es que ponen los huevos más grandes respecto a su masa corporal de entre todas las especies de aves acuáticas, el peso de la puesta puede igualar la masa corporal de una hembra no reproductora. Apuntamos que una hembra  pesa  de media Masa corporal media, 717 g en machos y 657 g en hembras.

Los pollos por su parte son muy precoces comienzan a hacer inmersiones a partir de las 7 horas de su nacimiento.

Pueden vivir en tanto en agua dulce como salobre, pero para reproducirse necesitan tener vegetación emergente densa en las orillas, donde ubican los nidos. Y una profundidad de la lámina de agua de entre medio metro y 3 metros.

Tienen un acentuado dimorfismo sexual, las hembras y los machos no se asemejan. Las hembras son muy miméticas y pasan desapercibidas, son los machos los que, sobre todo en época nupcial, llaman poderosamente la atención con su pico azul brillante y su cabeza blanca, la cual le da el epíteto latino de leucocephala, cabeza blanca.

Los cortejos comienzan en marzo, los machos en ese momento son muy territoriales, persiguen a las hembras e intimidan y pelean con otros machos, es uno de los momentos más vistosos de la especie. 

Esperamos que esta sencilla pincelada sobre uno de nuestros tesoros naturales os haya gustado, si es así y queréis saber cuáles son sus amenazas y como ayudarla y protegerla, aquí os dejamos algo de información general y unas recomendaciones:

La especie a nivel global tiene problemas por desaparición de su hábitat, cada vez hay menos humedales naturales, y los grandes embalses artificiales suelen están plastificados y no tienen la vegetación que la malvasía necesita. Además tiene problemas de hibridación con su “prima” la malvasía canela (Oxyura jamaicensis) ya que es esta última fue introducida artificialmente en Europa.

Pero a nivel local como ciudadanos también hay cosas que nosotros podemos hacer, al menos para evitarle daños. Por ello, desde la concejalía de Medio Ambiente se hace un llamamiento a comenzar a relacionarnos con la naturaleza de una manera más responsable, renovando nuestro compromiso con el Medio Ambiente 

Lo primero y más evidente es el respeto, como todas la aves silvestres, siempre están alerta y el ruido, la voz, o el movimiento brusco las ahuyentará, y cuando eso sucede reiteradamente huirán y abandonaran el lugar. Si nos acercamos a su hábitat intentad no molestarla, mantener una distancia suficiente para no asustarla, al mínimo movimiento extraño por su parte retiraros de la zona, con unos prismáticos se pueden observar perfectamente y con seguridad.

Otra cosa muy importante es que no liberéis especies domésticas o exóticas en el medio natural. A menudo pensamos ingenuamente que les estamos dando libertad, pero en realidad estamos causando un daño al medioambiente.

Os ponemos un ejemplo, se ha comprobado científicamente que en los humedales donde existen, o se han liberado carpas, la población de la malvasía se reduce notablemente, ya que compiten por el mismo alimento. No introduzcas peces en ningún humedal. O qué decir de la moda de los mapaches como animales de compañía, en zonas como Madrid los mapaches abandonados y asilvestrados destrozan cada año miles de nidos de aves.

Y por último si alguna vez os encontráis cualquier animal herido, o incluso un muerto, y sabéis o sospecháis que se trata de una especie protegida no dudéis en llamar al 112. Ellos se pondrán en contacto con el Centro de Recuperación de Fauna que vendrá a recogerlo y os dará indicaciones.

Texto y fotografías. Juan S. Calventus.