La concejalía de Medio Ambiente se ha puesto manos a la obra para sacar adelante varios proyectos que se encontraban paralizados en el Ayuntamiento de Mazarrón y que son fundamentales para conseguir un mejor funcionamiento y desarrollo en materia de reciclaje y medio natural en nuestro municipio.

En primer lugar el concejal de Medio Ambiente, David Fernández, se ha interesado por los problemas que acarrea la quema de restos agrícolas. Unas quemas que se multiplicaron en el municipio durante las dos últimas semanas de junio con motivo de la crisis del “E.coli”.  La actuación del consistorio “más que tener un carácter sancionador contra las empresas que han llevado a cabo esa quema, ha sido ponernos en contacto con ellos para que, juntos y en el menor tiempo posible, podamos acabar con esas quemas”.

En este sentido, Fernández ha desvelado que Medio Ambiente ha rescatado de un cajón de la concejalía de Urbanismo el proyecto de construcción de una planta de compostaje para el municipio.  El edil ha señalado que “le hemos dado curso administrativo otra vez a ese proyecto, el cual cuenta con el apoyo de las propias empresas agrícolas ya que acabaría totalmente con las quemas”. Si esta iniciativa sale adelante, Fernández confía que a finales de año desaparezca esta práctica del municipio.

Medio Ambiente también trabaja en la cesión de las charcas de la Rambla de Las Moreras a la Comunidad Autónoma para su puesta en valor. Se pretende que gracias a unas ayudas de la Unión Europea, se pueda construir un centro de interpretación y avistamiento de aves. “Este es otro proyecto que estaba por ahí durmiendo el sueño de los justos y que esta concejalía ha rescatado”, ha señalado Fernández.

Asimismo, el consistorio trabaja en un nuevo convenio con la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) para la puesta en valor del Centro de Protección y Recuperación de la Tortuga Mora situado en el paraje de Mal Camino. También se quiere trabajar con ANSE en los estudios de recuperación y protección de la malvasía cabeciblanca,  ya que esta ave amenazada anida en las charchas de la Rambla de Las Moreras y es “un pequeño tesoro que debemos proteger”, explica Fernández.

Finalmente, el concejal ha añadido también que “estamos trabajando en la adjudicación del ecoparque porque, aunque parezca mentira, funciona sin ninguna adjudicación”.  Respecto a este tema, el consistorio ha gestionado el trámite para que se realice el enganche de electricidad, que tampoco existía,  para que la compactadora y la trituradora de la que dispone “funcionen y no estén simplemente de adorno dentro de una nave”.