Semana Santa de Mazarrón
Dice textualmente así:
“Mucho agradezco la voluntad que por la suya muestran a las cosas de esta casa, y así en lo que tocare a esa villa, se tendría en ella particular cuenta en lo que toca a la prevención del lugar que dicen quiso tomar Alonso Merino, abastecedor general de mi Hacienda el Viernes Santo en la iglesia, y que en las procesiones que se han hecho a procurado lo mismo”.
El concejo colaborará en la celebración del Domingo de Ramos, y desde el siglo XVII, costeará los gastos de la compra de las palmas y los ramos con destino a esta procesión. Pero no será esta la única aportación que hará, cuidará que las calles principales estén limpias y decorosas para el paso de las procesiones, como así lo acuerdan en cabildo en marzo de 1767.
Las cofradías en Mazarrón en los siglos XVII-XVIII se agrupaban en torno a los distintos templos. La cofradía más antigua es la de Nuestro Padre Jesús Nazareno que tiene documentado su nacimiento entre los años 1653 y 1655, volviéndose a reglamentar en el año 1.876. Esta época de mitad a finales del siglo XIX es una época de reconstitución de las cofradías en Mazarrón, y prueba de ello son los reglamentos que se conservan de las cofradías de la Verónica, San Juan, Nuestro Padre Jesús, y otras. Estas cofradías seguirían su funcionamiento hasta la guerra civil, cuando tras la destrucción de las imágenes, y una vez terminada la contienda hubo varias familias que tomaron voluntariamente la responsabilidad de sacar los desfiles procesionales delante con muy pocos medios.
En los años 50, con unas pocas docenas de claveles, lirios, tomillos, romeros, traídos del monte, se perfumaban las calles al paso del Calvario que con su cruz de madera desnuda formaba parte del desfile junto a los Pasos de Nuestro Padre Jesús, Santo Sepulcro, Nuestra Señora de la Soledad y San Juan.
Llegada la Semana Santa de 1981, y ante la práctica desaparición de los desfiles procesionales de Semana Santa, un grupo de vecinos adoptan la decisión de reorganizar y revitalizar los desfiles procesionales. Se constituye una sola cofradía, la Cofradía del Santo Cáliz de la Preciosísima Sangre de Cristo, que aprueba sus Estatutos el 6 de febrero de 1.989, y que estará compuesta por cuatro Agrupaciones, las mismas que posteriormente constituirán las cuatro cofradías que protagonizaran la Semana Santa Mazarronera, Nuestra Señora de la Soledad, Nuestro Padre Jesús, San Juan y Santo Sepulcro. Posteriormente, una vez consolidadas las cuatro cofradías aprobarían sus Estatutos desapareciendo la originaria que las contenía a todas.
Las procesiones de Semana Santa en Mazarrón tienen lugar, Miércoles, Jueves y Viernes Santo.
El Miércoles Santo tiene lugar la procesión de las Promesas, de reciente creación, ya que sólo se celebra desde el año 2008, interviene en ella la cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, participando en ella el Cristo de la Soledad acompañado de un tercio de soldados romanos.
El Jueves Santo por la noche sale a las calles mazarroneras la Procesión del Prendimiento. En ella intervienen los pasos de la Flagelación, Verónica, Jesús Nazareno, Calvario, Cristo Crucificado y Virgen de la Amargura.
La Flagelación es un paso perteneciente a la Cofradía del Santo Sepulcro, el conjunto compuesto por una imagen del Cristo de la Columna, obra de Mengual fue adquirida en el año 1985, y con posterioridad, en 1993 se adquirieron los sayones que flagelan al Cristo, obra del mismo autor.
La Cofradía del Santo Sepulcro participa también en esta procesión con el paso de la Mujer Verónica. Sabemos de este paso que ya a mediados del siglo XIX se contaba con una imagen de este titular en la iglesia de la Purísima, y que los estatutos de ella constituyendo esta cofradía independiente datan del año 1877. La imagen actual fue adquirida en el año 1985 a Mengual, incorporándose a este paso un Cristo en el año 1999 obra de Juan Lorente. Constituye una gran singularidad en el mismo que es el único paso que es portado únicamente por mujeres.
La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno participa en el desfile de Jueves Santo, con su titular. Una imagen del siglo XVIII, de la escuela granadina y autor desconocido. En el año 1982 Sánchez Lozano restauró las manos y la cabeza, pues en ese momento era lo que se suele llamar una imagen de vestir. En 1986 el escultor Francisco Liza le compone el cuerpo le pone los pies, y le hace unas manos nuevas de manera que pueda adaptarse como Cristo del Rescate. La corona de espinas de plata maciza es de la misma época que la imagen.
El paso del Calvario pertenece también a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Es un trono construido por el escultor retablista Juan Lorente Sánchez, y sobre él desfilan las imágenes de la Virgen de los Dolores realizada por Sánchez Lozano en 1960; San Juan Evangelista obra del escultor Juan Lorente Sánchez hecha en 1987, y la imagen del Cristo de la Agonía realizada también por Juan Lorente.
La Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad procesiona con el Cristo de la Soledad, imagen venerada en la iglesia de la Purísima y que fue sacada por primera vez a hombros en el año 1996, año en que se procedió a la restauración de la imagen por Mariano Guillén y Adrián Jorquera, debido al deterioro que la misma presentaba. También se construyó un trono de madera tallada que da realce a este paso.
Cierra la procesión del Prendimiento la imagen de la Virgen de la Amargura, de la Cofradía de San Juan Evangelista. Es un talla de madera que inicia el maestro Sánchez Lozano y concluye su discípulo Francisco Liza.
El Viernes Santo se celebra de madrugada el Vía Crucis del Silencio con las imágenes de Nuestro Padre Jesús y la Virgen de la Amargura, que recorren el casco antiguo de la población, siguiendo las distintas estaciones. Por la noche tiene lugar la Procesión del Santo Entierro, en la que intervienen los pasos del Crucificado, Piedad, Virgen de la Cruz, Santo Sepulcro, San Juan y Virgen de la Soledad.
El paso del Crucificado pertenece a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Es un trono realizado por miembros de la cofradía e imagen perteneciente a la parroquia datada en 1963.
La Cofradía de San Juan Evangelista participa en esta procesión, con el paso de la Piedad, imagen adquirida en 1983 al imaginero García Mengual, cuyo trono es obra de Manuel Lorente. Es un tercio compuesto únicamente por mujeres.
El paso Virgen de la Cruz perteneciente a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno está compuesto por un trono del retablista Juan Lorente e imagen hecha por el escultor Francisco Liza en el año 1986, la cruz fue realizada por miembros de la cofradía.
El paso del Santo Sepulcro es el titular de la cofradía a la que da nombre. Es un trono compuesto por una cuna dorada, con tallas antiguas y del que tenemos noticias en el año 1852 en un inventario de la parroquia de San Antonio, en esa época era camarera y bienhechora de dicho paso doña Tomasa Oliva Muñoz. Posteriormente sabemos que la familia Monche lo cedió a la iglesia, y que gracias a Julián Campillo que lo escondió en su finca, se salvó de ser destruido durante la guerra civil.
La imagen del Cristo Yacente no es la antigua que según la tradición unos pescadores entregraron a Antonio Monche, pues desapareció en la guerra civil, la actual se adquirió en 1949 al taller de escultura religiosa Hijo de Ramón Bretcha, de Olot.
El paso de San Juan o paso Blanco, sale el Viernes Santo en procesión con la imagen del titular realizada en 1981 por García Mengual. Paso de gran tradición, pues participaba ya en las procesiones del siglo XIX.
Cierra la procesión del Santo Entierro la Virgen de la Soledad, titular de la cofradía a la que da nombre. Un paso que se caracteriza por su gran orden y por contar entre sus penitentes con gran número de mujeres. No sabemos con certeza de cuándo data la hermosa imagen de la Virgen de la Soledad, pero sí que en el año 1852 existía en la iglesia de San Antonio un altar dedicado a ella en el que estaban su imagen y a los pies el Cristo Yacente en el Sepulcro.
Esta es la hermosa Semana Santa Mazarronera, entrañable, popular, familiar, una Semana Santa que gracias al trabajo y esfuerzo de los cofrades que la han mantenido viva desde el siglo XVI, sale a las calles de nuestro pueblo en medio de los sones de tambores y trompetas, perfumando el aire con las plegarias calladas de los penitentes.